La vida de la rata es incierta, misteriosa y llena de mañas. Ese es el tipo de vida de que decidí llevar por estos veinte y pico años. Siempre arracando, evadiendo, escapado, dando la vuelta mientras chicoteaba la cola. -pirqui is mis ficil-
Breaking news de año nuevo, te gusto...me gustas y ahí estabamos los dos sentados en la mesa luego de caminar por horas, mirando la taza de té que ya estaba frío, no hicimos nada más.
A ratos sentía tus ojos sobre mi y yo sólo miraba los restos de té en el fondo de la taza, deseando tener el valor para seguir mirándote la cara, pero temía demasiado que el silencio que regalaba el primer amanecer del año te permitiera escuchar lo que decían los ojos de la que estaba sentada frente a ti.
A ratos sentía tus ojos sobre mi y yo sólo miraba los restos de té en el fondo de la taza, deseando tener el valor para seguir mirándote la cara, pero temía demasiado que el silencio que regalaba el primer amanecer del año te permitiera escuchar lo que decían los ojos de la que estaba sentada frente a ti.
Me escribió y a pesar de que lo intenté, no pude decirle nada. Le había escrito de vuelta por si acaso -Escorpio que se respeta está siempre listo-. Traté de leer lo escrito. Mejor dejé la carta mientras iba a preparar más té. Mientras lo preparaba y tú leías, me preguntaba si había sido la decisión correcta, era una de las primeras de este año. Aun no lo sé, sólo sé que al menos tomé una decisión. Seguimos todo como si nada.
es que dejar de arrancar es dificil para quien no sabe hacer nada más que eso.
Quizás que rumbo tome esto, pero el que sea... espero que pueda seguir dejándote poner tu cabeza sobre mi hombro para superar el cansancio de caminar juntos hasta el amanecer, con cara de marcianitos bailando cumbia.